miércoles, 18 de noviembre de 2009

Pocos avances mundiales en busca de un aire puro, asegura director de la CARDER, Alberto Arias Dávila

La celebración este 19 de noviembre del Día Internacional del Aire Puro, le permite a la sociedad comprender la dimensión del daño que estamos provocando los humanos sobre la atmosfera, al descargar en ella no 10.000 millones de toneladas métricas de combustibles fósiles, sino también residuos de cerca de 150.000 productos provenientes de la industria química.

La afirmación fue hecha por el director de la CARDER, Alberto Arias Dávila, quien dijo que el aire se está llenando de compuestos sintéticos de alta toxicidad que están presentes en plásticos, solventes, pinturas y plaguicidas, como la acroleína, benceno, cloroformo, tetracloruro de carbono, DDT, formaldehído, percloroetileno, tolueno y tricloroetileno.

Dijo que a pesar de todos los llamados que se han realizado por parte de organizaciones ambientales y científicos, en el mundo se siguen emitiendo compuestos halogenados como tetracloruro de carbono, fosgeno y cloruro de vinilo, que impactan la capa de ozono.

Recordó Arias que las emisiones de estos componentes a la atmósfera por la acción del hombre se presentan en forma de gases, vapores, polvos y aerosoles, y a través de la termodinámica y la radioactividad.

“Los inversionistas son conscientes de los impactos dañinos del uso de ciertos elementos básicos para el proceso productivo industrial y agrícola, pero pueden más sus ansias de riqueza que la necesaria protección de la atmosfera”, dijo que el director de la Corporación Autónoma Regional del Risaralda, quien aprovechó la ocasión para abogar porque en Copenhague se logre un acuerdo mundial sobre la disminución de las emisiones atmosféricas de sustancias de efecto invernadero, que no sólo están desestabilizando el clima, sino que dañan los ecosistemas y la causan graves perjuicios a la salud de las personas.

No hay comentarios.: